Antroxo 2014 en Candás

La Mosca Cojonera...Suma y Sigue.

Estos días vivimos en Carreño otro episodio del eterno cuento del señor Fernández, concejal del PaPo (Partido, Popular), intentando llegar a ser Alcalde del municipio por el papo (como dicen en este pueblo).

Como es de costumbre, este personaje de opereta, aprovecha cualquier oportunidad para hacerse oír en  la prensa, en un vano intento de alcanzar el bastón de mando, algo que las urnas le negaron. 

 En esta cruzada personal no le importa utilizar la desgracia de una familia, ni solicitar extrañas alianzas que tan solo le benefician a él y a su partido, el PaPo.

 Es de destacar el enorme cabreo que demuestra cuando la lógica y el sentido común traen de vuelta a esta "Alicia en el país de las Maravillas Políticas" al mundo real de nuevo.

Me temo que este no va ha ser el último episodio de estas entregas de nuestra "mosca cojonera" particular.

P.Olivares.

La moción de censura en Carreño, sin visos de prosperar

Presente y futuro de la Sanidad Pública

Estos días puedo hacerme eco de la terrible noticia de la muerte de dos pacientes en los pasillos del Hospital Virgen de la Salud, en Toledo.(pincha para ver la noticia).

 Aunque esto lo podamos ver desde aquí como algo que pasa en otra región, esto puede pasar perfectamente en nuestros hospitales.

 El Gobierno no se cansa de proclamar que aboga por una sanidad pública universal, de calidad y gratuita. Con los tremendos recortes que la sanidad está sufriendo día a día, unido al intento de privatización, las dos primeras premisas van en sentido contrario a lo pretendido por el Gobierno. En cuanto a lo de "sanidad pública gratuita", eso es la gran mentira que han esgrimido los políticos siempre. 

 La sanidad, la educación y otras muchas cosas, salen de nuestros impuestos, por consiguiente no nos salen gratis. Las pagamos entre todos, y los políticos tan solo son meros gestores de estos bienes de la sociedad. Algo que estos últimos a menudo parecen olvidar comprando o vendiendo nuestro patrimonio a su libre albedrío.

 Todo esto nos lleva a una situación real que se vive en nuestros hospitales, donde  atienden a  nuestras familias. Hospitales saturados, con cada vez menos medios y personal, donde parece que empiezan a primar las razones económicas por encima de las médicas.

 Puedo poner ejemplo a esto que digo con el relato de un caso real, que le sucedió a un amigo, en el Hospital de Jove, en Gijón.

 El padre de esta persona acudió el pasado mes de Noviembre a urgencias de dicho hospital con una insuficiencia respiratoria grabe, como consecuencia de una enfermedad crónica.. Fue atendido por la doctora de urgencias de Jove, donde fue estabilizado y conectado a una máquina de respiración asistida. Hasta aquí todo normal, siguiendo el protocolo de actuación de emergencias (supongo).

 Acto seguido los familiares son citados en el despacho médico para ser informados del estado del paciente y de las actuaciones realizadas (sigue siendo normal). Aquí se les dice que serán informados por un especialista de planta ya que la doctora de Urgencias ya ha acabado con su trabajo (normal me imagino).

Entonces hace acto de presencia una doctora que comunica que vendrá el jefe de la unidad "tal" que quiere hablar con los familiares del paciente. Este doctor se presenta y tras relatar la actuación de su colega de urgencias que salva la vida del paciente, haciéndola como suya, ya que habla en primera persona, propone a los familiares que mediten sobre los costos de esta actuación y que piensen, cito textualmente: " si consideran rentable cambiarle el motor a un coche viejo, o  que si no sería mejor darlo de baja ya que económicamente no compensa, dado que va a durar muy poco".

Esto que a mí me puso los pelos de punta, se puede oír en las consultas de un Hospital concertado donde tenemos que ir a tratarnos pagando con nuestros impuestos. Ya no somos pacientes, tan solo somos "cash" en un sistema que prima los intereses económicos, por encima de los humanos o médicos. Lo próximo será pedir a los médicos un master en economía en vez del juramento Hipocrático.

E.M.M. 

CONCENTRACIÓN CIUDADANA