Me parece magnifica la resolución de la alcaldía de Langreo, al modificar la normativa municipal, para intentar llevar el civismo y la convivencia a ciertos sectores que ultimamente andan muy creciditos, reclamando derechos donde no los hay. Yo soy la primera en rechazar el maltrato animal, pero los animales, son eso, animales.
Desde ciertos sectores "animalistas" se están vertiendo acusaciones de leyes intransigentes con "sus perritos", y se pretende llevar las mascotas hasta a la visita al hospital. Lo primero es que donde estos animalistas deben actuar, a la hora de la verdad no aparecen, y animales en peligro de extinción están condenados sin que estos ecologistas de piquillo hagan absolutamente nada. Lo segundo ya es hora de que los transeúntes que tenemos que ir haciendo slalon por las aceras y parques, y simplemente la gente que haya decidido no compartir su vida con animales y sus excrementos tengan también derechos.
Aida_LF.
2 comentarios:
Que razón tienes Aida, que cansados estamos de ir a parques y áreas de descanso rodeados de excrementos y meados de perros. Me parece muy bien que se pida respeto para los animales, pero primero es el respeto hacia las personas. Que respeten las normativas que para eso están.
Es triste pero es así. Hoy en día se consiguen mejores índices de civismo, educación, en definitiva, saber estar, cuando atacamos directamente al bolsillo. El resto de los ciudadanos conseguimos un beneficio multiplicado por dos: el primero que aquellos "poco civilizados" moderen su comportamiento por temor a la reprimenda económica. Y el segundo que los ingresos por sanciones se utilizarán (no seamos malpensados) en mejoras comunitarias.
Con respecto a los animales salvajes en peligro de extinción, actualmente existen, al menos, 12 especies en España en peligro de extinción frente a las más de 11.000 del resto del planeta.
El desinterés social hacia este problema es realmente lamentable.
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