sábado, 7 de mayo de 2011

Negativo y positivo.

Mi fuerte no es la moda ni nada que tenga que ver con ella pero como no estoy ni ciego ni sordo no me pasó inadvertidas las campañas que protagonizaron varias modelos en contra del uso de pieles animales. Posaron en las fotos en unos estéticos y estudiados desnudos que, simpatizantes o no de la causa, no pasaron inadvertidos.
Cual no será la sorpresa al ver una de aquellas modelos, Naomi Campbell (reconozco haber tenido que preguntar su nombre), posando ahora con unas magníficas pieles alrededor de su cuerpo. Buscando fotos de esta señora me encuentro que son numerosas las fotos de ella con tan estupendo atavío, incluso posando en alguna foto con su estupendo desnudo tapado por pieles ajenas.
¿Os recuerda a algo o más bien a alguien? ¡Ya lo sé, os lo estoy poniendo muy difícil! pero intentar abstraeros de la belleza y juventud de la modelo y quedaros solo con los detalles generales. Todos llevamos dentro un puntito malicioso y el mío no pudo dejar de notar la semejanza dentro de la enorme diferencia.
Nos encontramos ante el negativo de Rosa Ana. Si cogemos ese negativo y lo positivamos y aplicamos el multiplicador de volúmenes del photoshop, aplicamos arrugas, canas, papada y demás nos encontramos con: ROSA ANA. Es como sacar un dragón de un cervatillo pero como bien dijo ella en una ocasión, el photoshop se nos da muy bien. Lo que no se ve en ninguna de las fotos es el mal talante y la mala leche que se gasta la modelo pero le gana nuestro dragón porque a todo esto hay que sumarle lo mala persona que puede llegar a ser.


Solo publico este referente ya que la foto del original puede resultar nociva para la vista y la tarjeta gráfica.
Vito Losse.

1 comentario:

P. Olivares dijo...

Al igual que la top model, Rosa Ana se une a ligas animalistas solo por el mero interés. Me pregunto como quedarían los carteles de LV-GV Asturias con la foto de ella luciendo el abrigo de pieles que paseaba por las calles de Carreño, cogidita de la mano de Ciprianin, que como ecologista "independiente" (vamos, que va por libre), no le ponía ascos a arrimarse a la sensación de acolchado de los pellejos en cuestión. En esta región nos gusta llamar a las cosas por su nombre, pero con estas dos me resulta difícil ponerles un solo calificativo, falsas... vendidas... hipócritas... podría estar así hasta mañana.